Son muchos los dentistas que deciden emprender y abrir sus propios consultorios privados, pero a decir verdad, son pocos los que alcanzan un éxito significativo que recompense todo el esfuerzo que conlleva.
En este artículo te daremos un par de ideas para que las puedas tomar en cuenta si ya tienes tu propio consultorio odontológico o si te encuentras actualmente pensando en abrir uno en el futuro.
El problema inicia de la siguiente manera:
Bien, hay que ser honestos, personalmente tengo más de 15 años educando a dentistas que atienden pacientes de diversas formas, generalmente trabajando para otros colegas o trabajando en centros dentales grandes y he podido comprobar que son muchos los que luego de pensarlo bien y de meditar un poco, dan el salto abriendo sus propios consultorios.
La mayoría lo hacen porque consideran que ese movimiento puede representar una gran oportunidad de traer mejoras a sus vidas, pero la gran mayoría por alguna razón, lo realiza con una visión bastante conservadora.
Por ejemplo:
Son muchos los que abren con la intención de comenzar a atender a pacientes que atendían en otros lados, es decir a quienes consideran «sus pacientes», con quienes con el paso del tiempo han desarrollado una amistad o una relación profesional de varios meses o a veces incluso años.
Y como punto de partida eso está bien, porque es por medio de esos pacientes que se puede comenzar a generar resultados en los primeros meses de un consultorio dental nuevo, ya que sin duda existe una gran posibilidad de que estas personas sigan al odontólogo hacia el nuevo lugar, es decir al nuevo consultorio o clínica dental, porque prefieren seguir atendiendo sus necesidades dentales con el mismo dentista que los ha visto por meses o años.
El problema radica en que son muchos los dentistas que luego de abrir sus propios consultorios, mantienen esa idea durante mucho tiempo, es decir, se mantienen dependiendo únicamente de los mismos pacientes y de las posibles recomendaciones o referencias que ese reducido grupo de pacientes les podrá generar.
Básicamente hablamos de consultorios que solamente tienen dos puntos de entrada de ingresos: «Sus pacientes» de toda la vida, es decir, ese pequeño grupo de pacientes fieles que los ha seguido y los pacientes nuevos que llegarán por recomendaciones de ese mismo grupo (que ya mencionamos que puede ser generalmente reducido).
Mantenerse con ese esquema conservador puede considerarse que no es del todo una mala idea, porque a decir verdad, es asi como básicamente nacen y sobreviven muchísimos consultorios dentales.
Pero hay que ser totalmente sinceros y aceptar que bajo ese esquema, existen muchos riesgos y nunca será fácil convertir un pequeño consultorio en algo más grande, porque hoy en día con el nivel de competencia que existe en el campo de la odontología privada, es claro que tener solamente esos dos puntos de entrada de ingresos, no necesariamente permiten generar grandes resultados.
De hecho…
En algunos casos de hecho, muchos consultorios generan ingresos que solamente permiten cubrir sus costos y dejan apenas un pequeño margen de utilidad que en algunos casos obliga a los dentistas a tener múltiples trabajos y al mismo tiempo generan muchas dudas a los profesionales en relación a si es una buena idea continuar o cerrar con su pequeño consultorio.
Bajo ese esquema conservador, un consultorio no dejará de ser nunca, ese pequeño lugar desde el que se atienden a un grupo exclusivo de pacientes fieles por las tardes o por las mañanas y probablemente nunca permitirá alcanzar cierto nivel de crecimiento (financiero), lo cual a decir verdad, no es tanto un factor relacionado con avaricia, sino más bien, un factor bastante necesario hoy en día considerando que el costo de la vida aumenta cada vez más con el paso del tiempo.
¿Cómo te suena a ti la idea de alcanzar un éxito mayor con tu pequeño consultorio dental?
Hablamos de un éxito verdadero, en donde tú puedas ser un dentista totalmente feliz en todos los sentidos, porque eres un profesional que disfruta a diario de su trabajo, que tiene suficientes pacientes propios para poder vivir tranquilo, que tiene tiempo suficiente para disfrutar de su familia, que no vive con estrés, que no tiene deudas, que descansa lo suficiente y que no tiene que tener 2 o más trabajos.
Eso se puede obtener por medio de tu propio consultorio dental, pero es evidente que con el esquema conservador del que hemos hablado, eso resulta extremadamente complicado.
Para alcanzar ese objetivo es importante pensar en crear más puntos de entrada de ingresos que no son más que puntos de entrada de pacientes, porque definitivamente depender solamente de tus pacientes fieles o de las recomendaciones que estos puedan generar es algo que no te ayudará a poder alcanzar ese objetivo.
A menos que tengas planeado trabajar de esa forma otros 20 años para que gracias a tu enorme recorrido, tengas una lista enorme de pacientes fieles y estos te permitan generar un volumen de ingresos bastante aceptable.
Pero…
¿Por qué esperar 20 años por algo que hoy en día puede realizarse en unos dos años o menos?
Todo dentista con su propio consultorio dental que alcanza un éxito mayor, lo ha logrado porque ha ido más allá y no se ha limitado a depender únicamente de dos puntos de entrada, sino que se ha enfocado en crear más puntos de entrada de pacientes y se ha preparado lo suficiente para llevar su pequeño consultorio a otro nivel.
Lo que se tiene que buscar es generar en el corto plazo, nuevos pacientes y nuevas recomendaciones que provengan desde diversas vías:
Nuevos pacientes que viven cerca, pacientes de otras clínicas que se cambian a tu consultorio, pacientes nuevos que atraes con publicidad moderna, estratégica y ética, pacientes antiguos que “revives” con técnicas modernas de retención/recuperación, pacientes que no viven cerca pero que cautivas con tu marketing y te visitan, etc.
Adicionalmente a eso, los dentistas que tienen más éxito con sus consultorios pequeños, gracias a esos esfuerzos antes mencionados que realizan, alcanzan otro punto sorprendemente fuerte que es básicamente la creación de muchísimas más recomendaciones que surgen a partir de todos esos nuevos pacientes que logran atraer.
Y todos sabemos lo importante que son las recomendaciones o referencias en algo tan personal como lo es la odontología…
No es lo mismo tener 5 o 6 recomendaciones mensuales de parte de tu reducido grupo pacientes más fieles, que tener 40 o 50 recomendaciones mensuales gracias a todos esos nuevos pacientes que atraes por diversas vías.
Te aseguro que no es lo mismo…
Las recomendaciones o referencias se multiplican y así mismo se multiplican los ingresos y ganancias.
Es muy importante pensar como si tu consultorio fuera una pequeña empresa y es extremadamente importante poner en marcha estrategias de marketing dental que te permita atraer más pacientes.
Marketing, branding, publicidad ética, son solamente algunas de las áreas que debes considerar si quieres en verdad tener un mayor éxito con tu pequeño consultorio dental y llevarlo en verdad a otro nivel.
Mientras actúes con ética, mientras respetes los reglamentos impuestos por colegios o entidades de dentistas en tu localidad, mientras no te dediques a dañar al sector ofreciendo precios demasiado bajos, puedes perfectamente considerar tu pequeño consultorio, como una pequeña empresa que a futuro en el corto plazo te puede dar grandes resultados.
No hay nada mejor que un dentista feliz que gracias a su esfuerzo y a su ética, obtenga como consecuencia directa, crecimiento financiero que le permita tener una mejor calidad de vida y que le permita al mismo tiempo seguir ofreciendo mejores servicios dentales y ayudando en la medida de lo posible a la comunidad, si es que ese es uno de sus deseos.
Cabe mencionar que no se trata de dinero o de darle un toque demasiado comercial a tus servicios, sino de desarrollo y crecimiento que todo profesional que se esfuerza puede alcanzar.
En el caso de la odontología, brindar un servicio de gran calidad y con mucha ética, trae como consecuencia directa el crecimiento financiero, que es algo que no tiene nada de malo, mientras hagas las cosas bien y no cometas el error de convertirte en un mercader de la salud bucal.
Si te interesa aprender más sobre esos temas, te sugiero darte de alta en nuestro programa gratuito de educación en materia de negocios, marketing ético y demás exclusivo para dentistas, compartimos muchos más contenidos gratuitos que pueden resultar útiles para todo profesional de la odontología que tiene deseos de crecer. Puedes unirte ingresando tu nombre y tu correo desde el formulario inferior.
Hasta la próxima!
Un saludo,
Sergio Montesinos
¿Quién es Sergio Montesinos?
Consultor certificado del BTLCenter y director del área de educación de negocios para profesionales de la odontología. Tiene una Licenciatura en Marketing, un MBA y por más de 15 años se ha enfocado en la consultoría en Marketing y atracción de pacientes para el sector odontológico.
La razón para enfocarse en este sector nació desde hace mucho, básicamente creció entre odontólogos, sus padres son ambos odontólogos de profesión y fue por medio de sus clínicas que comenzó a especializarse en el marketing enfocado en la odontología. El joven rebelde de aquel entonces, que no estudió odontología terminó relacionando su carrera con la de sus padres y siendo la pieza clave para que sus padres se convirtieran en profesionales más exitosos.
Durante los últimos 15 años se ha dedicado a la consultoría en el sector dirigiendo unidades especializadas en diversas agencias de Marketing y relaciones públicas, ayudando a cientos de odontólogos y clínicas en diversos países de habla hispana, Canadá y Estados Unidos.
Hoy en día es el director de educación en materia de negocios para odontólogos para Latinoamérica y España en el BTLCenter – Business & Technology Learning Center.
Únete a nuestro programa de estudios gratuito, titulado "comenzando tu camino hacia más ingresos y ganancias en odontología" CCHMIG. Deja tu correo en este formulario y te haremos llegar gratuitamente todos los contenidos de estudio, sin costo alguno.